El inicio se sitúa junto a la iglesia de
Ollobarren. El trazado de la ruta es de tipo raqueta. El camino atraviesa una chopera y continúa en un bosquete de carrascas, por una senda de cascajo de elevada pendiente que zigzaguea por la ladera. Desde allí se contempla un precioso paisaje del
valle de Allín. Al llegar a lo más alto se pasa por el denominado Agujero de Ollobarren, una cueva-pasadizo de 30 metros. Más adelante la pista se abre a la explanada de la
ermita de Santiago de Lóquiz y se desciende por el Puerto de
Ganuza, pasando por dicha localidad, completando la ruta en Ollobarren.