Peregrino camino ignaciano

Camino Ignaciano

Camino Iganaciano

El Camino Ignaciano emula la ruta de peregrinaje que realizó Ignacio de Loyola en 1522 entre Azpeitia (Gipuzkoa) y Manresa (Barcelona) y que se adentra brevemente en Tierra Estella-Lizarraldea.
 
En 2012 se creó una ruta a iniciativa de la Compañía de Jesús con el objetivo de ofrecer una experiencia de peregrinación, siguiendo el proceso espiritual que hizo San Ignacio de Loyola, y se divide en 27 etapas que van desde el País Vasco, La Rioja, Navarra y Aragón hasta Cataluña.
 
El camino, que en 2022 celebra su 500 aniversario, se inicia en la casa donde nació Ignacio de Loyola y discurre durante 650 kilómetros hasta llegar a la que se conoce como ‘Cova de San Ignacio’ en Manresa, donde el santo vivió diez meses como eremita antes de continuar su camino a Roma en su idea de llegar a Tierra Santa.
 
Etapas por Tierra Estella-Lizarraldea: 
 
Después de cuatro etapas y más de un centenar de kilómetros por el País Vasco, el camino llega a tierras navarras por su parte noroeste. Así, la quinta etapa une la localidad alavesa de Alda con la navarra de Genevilla en una ruta que ofrece dos opciones: una de 23,3 km que pasa por los municipios de Oteo y Antoñana, y otra de 18,3 km que pasa por Orbiso antes de introducirse en Navarra.
 
La siguiente etapa, la sexta, regresa de nuevo a Álava uniendo Genevilla con Laguardia en un recorrido de 27 kilómetros. Durante esta jornada, los peregrinos visitan las localidades navarras de Cabredo, Lapoblación y Meano.
 
El Camino Ignaciano se une a las experiencias de peregrinaje como el Camino de Santiago y pone en valor los elementos patrimoniales y el entorno natural de las comarcas por las que transcurre, además de unirse a la oferta de senderismo por etapas, una opción cada vez más demandada.
Puente romano Villatuerta

El camino de Santiago

El Camino de Santiago

El Camino de Santiago atraviesa Tierra Estella-Lizarraldea trazando una diagonal de noreste a suroeste antes de adentrarse en La Rioja. Desde Puente La Reina (punto de confluencia de las dos grandes rutas que atraviesan los Pirineos para tomar rumbo oeste hasta llegar a Santiago) hasta Viana, son muchos los monumentos relacionados con la ruta jacobea que pueden contemplarse en nuestra zona.
 
Algunos de estos monumentos representan auténticos hitos del arte jacobeo, como el puente románico de Puente la Reina; el palacio de los Duques de Granada de Ega y las iglesias de San Pedro y San Miguel, en Estella; el monasterio de Iratxe en Ayegui; las iglesias de Santa María, en Los Arcos, y del Santo Sepulcro, en Torres del Río; y las Iglesias de San Pedro y Santa María, en Viana. Pero son muchos otros los que pueden ser contemplados por el visitante que se acerque a Tierra Estella-Lizarraldea: edificios, rincones y parajes con encanto, como la antigua calzada romana en Cirauqui; la ermita de San Miguel, en Villatuerta; el aljibe de Villamayor de Monjardín, los cruceros que jalonan el Camino…
 
 Además, un recorrido por el tramo estellés del Camino de Santiago permite disfrutar del paisaje diverso de la zona: de las aristas de las sierras de Lóquiz y Urbasa, de los bosques de encinas, de los campos de cereal, de los viñedos de los caminos y veredas, de los ríos y riachuelos.
 
A pie o en bicicleta, por caminos y calles, o en coche, a través de la Autovía del Camino, un recorrido por la ruta jacobea es una propuesta ideal para conocer Tierra Estella.

Monasterio de Irantzu

Monasterio de Irantzu

De interés

El Monasterio de Santa María de Irantzu, de origen cisterciense que comienza a construirse en el año 1176, y se prolonga hasta el siglo XIV, está situado en un inigualable entorno histórico – artístico, de origen cisterciense y cuya construcción se prolonga desde el siglo XII hasta el XIV. Del conjunto de edificaciones medievales permanece el pie de la Iglesia, el claustro, la sala capitular, las celdas de castigo, el locutorio y la cocina, correspondiendo el resto a sucesivas remodelaciones de los siglos XVI y XVII. Su claustro gótico, elegante y austero, es uno de los rincones más bellos del monasterio, que invita a descubrir las diferentes dependencias del cenobio reformado en 1942. 
 
La iglesia, dedicada a Santa María, tiene planta rectangular con tres naves de cinco tramos cada una, crucero y transepto, y priple cabecera de testero recto, destacándose al exterior la capilla mayor por su mayor profundidad. Las cubiertas son bóvedas de crucería simple. La decoración es escasa reduciéndose a motivos florales estilizados. En el muro de los pies se abre un óculo fruto de la restauración. En el siglo XVII se incorporó al templo una nueva sacristía. 
 
El claustro, adosado al lado meridional del templo, tuvo planta cuadrada ligeramente irregular, con seis arquerías entre contrafuertes en los lados septentrional y meridional, siete en el occidental y ocho en el oriental. Las galerías oriental y meridional hubo que reconstruirlas prácticamente en su totalidad. Del estudio de la escultura de capiteles, ménsulas y claves se deduce la evolución estilística sufrida (s. XIII-XIV), lo mismo que del análisis arquitectónico de sus arcadas. El lavarotio ha sido totalmente reconstruido. 
 
En la pared de la curjía se abre un arco y dos vanos a sus lados que dan a la sala capitular del monasterio, estancia que fue construida en fechas de finales del siglo XII. Concretamente se acede a ella a través de un arco de medio punto, situado tras una ventana abierta bajo arcos de medio punto que se apoyan en columnas y pilastras. Las columnas constan de fustes lisos y capiteles decorados. En la parte posterior de la pared observamos otros vanos, y entre los arcos, los nervios de las bóvedas de crucería que cubren la crujía. Asimismo pueden apreciarse los arcos fajones apuntados que sostienen las bóvedas.
 
Se encuentra en muy buen estado de conservación y rodeado de montes y entornos naturales de gran belleza.

Internet

Localización

Situado en Abarzuza

En la carretera NA-120, kilómetro 8 entre Estella-Lizarra y Echarri-Aranaz, a la altura de Abárzuza, hay un desvío a mano izquierda que conduce directamente al Monasterio.